
Conducir por autopistas en Indiana puede ser una experiencia incómoda. Muchos tramos están llenos de baches y necesitan reparación urgente. Pero el estado tiene dificultades para encontrar fondos suficientes. Como posible solución, Indiana considera implementar peajes en autopistas interestatales.
Una nueva ley, ya firmada, facilitaría ese proceso.
El problema del financiamiento vial
Actualmente, el mantenimiento de las carreteras depende del impuesto a la gasolina. Sin embargo, este ingreso ya no cubre los costos necesarios para reparar, mejorar o ampliar la red vial.
“Si queremos una infraestructura adecuada, esta es la única opción que realmente funciona”, dijo el senador estatal Michael Crider (R-Distrito 28), autor de la Ley 1461.
“Los peajes permitirán financiar las carreteras del futuro de manera justa”.
¿En qué consiste la nueva ley?
La nueva Ley 1461, promovida por el senador estatal Michael Crider, permite al Departamento de Transporte de Indiana (INDOT) solicitar una exención federal. Esto le permitiría implementar peajes en autopistas sin necesidad de estudios previos, leyes nuevas o restricciones de ubicación.
Las autopistas más mencionadas son la I-65 y la I-70. Los fondos recaudados servirían para ampliar carriles, mejorar el pavimento y aumentar la seguridad vial.
Incluso se plantea ampliar la I-70 a seis carriles por sentido, lo que mejoraría la fluidez del tráfico y la seguridad de los conductores.
¿Cuánto dinero generaría?
Un estudio reciente estima que los peajes podrían aportar hasta 38 mil millones de dólares para el estado de Indiana de aquí al año 2050. Parte de ese dinero se usaría para ampliar la I-70 a seis carriles por sentido.
Opinión del gobernador Mike Braun
El gobernador también apoya la medida. En un evento en Munster, declaró:
“Indiana es el cruce de caminos del país. En vías como la I-70, el 70% del tráfico no se detiene ni para comer ni cargar gasolina. Por eso, debemos considerar los peajes si queremos mantener nuestras autopistas principales”.
Un portavoz del gobernador agregó que aún no se ha tomado una decisión final. El estado continúa analizando todas las opciones posibles.
¿Cuándo se implementarían?
Aunque se logre la aprobación federal, el proceso llevará tiempo. Podrían pasar hasta cinco años antes de instalar un sistema de peajes. Durante ese periodo, el público podrá expresar su opinión en varias audiencias.
“Muchas personas ya nos han dicho que no están de acuerdo”, reconoció Crider.
“Yo tampoco soy fanático de los peajes, pero no veo otra alternativa viable”.
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